VUELTA A CASA DE MI MADRE (2016) de Eric Lavaine

“¿Te imaginas volver a vivir con tus padres?”
Desde Francia llega esta afable comedia familiar, en una línea próxima a los films galos que vienen triunfando en taquilla. Este, sin ser tan tronchante como otros recientes, navega perfectamente entre la humorada bienintencionada y algunas gotas dramáticas vinculadas a la extendida situación que apunta el título.
La historia va de menos a más, centrándose básicamente en la relación entre una arquitecta de 40 años que se ha quedado sin trabajo y sin hogar y su madre, una mujer liberada que vive a su aire. Ambas volverán a convivir bajo el mismo techo tratando de llevar el día a día por el buen camino.
Los compases iniciales del relato ponen el foco en la búsqueda de empleo de esta joven, tratando con ironía contenida una circunstancia tan triste como actual, además de explotar puntualmente con gracejo el difícil acomodo mutuo de los hábitos de las protagonistas.
No obstante, mediado el metraje, el rol materno va adquiriendo mayor peso y, como si el guionista se hubiera dado cuenta del potencial cómico de esta viuda moderna, le cede el primer plano; lo que constituye un acierto en toda regla, porque los mejores gags llegan a partir de entonces. Además, entran en juego otros personajes y se plantean unas fricciones entre ellos donde la tensión con que se enfrentan da paso a secuencias amables y simpáticas, aunque los momentos verdaderamente descacharrantes se concentran en unas pocas escenas.
El choque generacional, el derecho a rehacer la vida a cualquier edad, despojarse de los prejuicios sociales, la necesidad de la mutua comprensión y de aceptar limitaciones en las relaciones con los seres queridos son algunos de los temas que aborda esta película. A ello se une un retrato particular de lo que es una dura realidad parea muchos desempleados, pero sin hacer sangre, con el fin de no quebrar el divertimento que propone.
El conjunto se beneficia y mucho, de la apreciable interpretación con la que se luce la veterana Josiane Balasko. A su lado mantienen el tipo Alexandra Lamy y una temperamental Mathilde Seigner.
Eric Lavaine, el realizador de la hilarante “Barbacoa de amigos” (2014), es el responsable de este estreno, recomendable especialmente para el público más adulto.