EL VERANO DE MAY (2013) de Cherien Dabis
“Me llamo May y mi vida es perfecta…”
Presentada ante el gran público en el festival de Sundance, “El verano de May” hace el camino inverso a la anterior película de Dabis (“Amerrika”) donde era una ciudadana Palestina y su hijo los que emigraban a los Estados Unidos en plena invasión de Irak. Esta vez, May (interpretada por la misma Cherien Dabis), escritora residente en Nueva York vuelve a su Amman natal para preparar su boda y reencontrarse con su familia. Ambas películas tratan el tema del choque cultural, pero a diferencia de “Amerrika” en esta cinta el tema principal no es a priori tan interesante como lo era la emigración. Dabis centra la historia en las dudas de May en cuanto a su matrimonio; el regreso a su hogar le hace replantearse sus sentimientos hacia su novio, ausente durante la mayoría del film y del que solo oímos su voz por teléfono.
Tenemos ante nosotros una película que contiene muchos ingredientes para que llegásemos a considerarla una película sobresaliente, y me encantaría poder decir que es así.
Película escrita y dirigida por una mujer, lo cual ya es algo difícil de encontrar. Trata sobre los conflictos internos de varios personajes femeninos, que además, residen en Amman, Jordania. E incluso supera el test de Bechdel, que puede parecer un test absurdo, pero que no superan la mayoría de las películas.
Además cuenta con un conflicto religioso, ya que el futuro marido de May es musulmán, aunque residente en Estados Unidos, y la madre cristiana ferviente se opone a esa boda, pensando en el futuro de su hija. A destacar el personaje de la madre, magníficamente interpretado por Hiam Abbass. Este personaje tiene un papel importante ya que además de preocuparse por sus hijas tiene que llevar a sus espaldas el divorcio con el padre de éstas, empresario americano interpretado por Bill Pulman que la abandonó por una chica más joven. Algo que ya le ocurría también a la protagonista de “Amerrika”, y que pone en relieve el pensamiento arraigado en la sociedad de que tener alguien más joven al lado es símbolo de poder.
El film trata además temas como el machismo en Jordania, que lo vemos en las miradas de los hombres a May cuando sale a correr por las calles de Amman, la homosexualidad o el cercano conflicto en Palestina. Pero por estos temas, como el choque cultural y los conflictos religiosos, pasa solo de puntillas, sin llegar a profundizar mucho en ellos, lo que hace que la película sea fácil de ver, entretenida en su mayor parte, pero sin transcendencia.
La cinta es difícil de calificar ya que nada entre el drama y la comedia. Con personajes altamente dramáticos como la madre o personajes de gran comicidad e ironía, como es el caso de la hermana pequeña, interpretada por Alia Shawkat. Pese a que como he dicho se centra más en las problemáticas familiares que en los conflictos sociales y religiosos debo subrayar algunos momentos brillantes que tiene el film, donde se contextualiza la acción remarcando el contraste entre la superficialidad en la que viven y el conflicto palestino a tan solo unos kilómetros. Uno es una conversación entre May y su hermana pequeña bañándose en el mar muerto, preciosamente filmada, donde May comenta que a poca distancia hay minas en el agua y la gente está en guerra mientras que para ella la mayor preocupación es si en la boda contrata un dj o una banda. Otra de las escenas ocurre en la piscina del resort donde celebran la despedida de soltera de May, cuando en un momento en el que las hermanas están discutiendo se oye pasar un avión de guerra que hace enmudecer a todos.
Que Cherien Dabis haya decidido saltar al mundo de la interpretación ha hecho un flaco favor a la película. Consigue defender su papel y tiene momentos buenos pero, siendo el personaje que lleva todo el peso del film, Dabis no consigue transmitir del todo.
Es una película amena de ver, divertida por momentos, con personajes refrescantes, temas en los que podemos encontrarnos como las relaciones, tanto familiares como amorosas, y con muchos otros temas subyacentes muy interesantes, pero para mí gusto, poco aprovechados. Así como también está poco aprovechada la localización, ya que sí que nos muestra unas escenas preciosas del desierto, pero no llegamos a ver el alma de la ciudad de Amman y su gente. Una película interesante pero que no deja huella.
“My name is May and my life is perfect…”