DONDE CABEN DOS (2021) de Paco Caballero
“Parece que a veces toda la vida te ha llevado a un momento concreto”
Aunque solo sea por Ana Millán y sus reflexiones. O esa escena inicial con la que los que la seguimos desde hace mucho hemos fantaseado. No voy a comentar nada más. Y eso que —fijaros lo que me mojo— quizás esto sea lo más liviano de todo el filme.
Si va de parejas, ya os imaginaréis un poco el rollo: la rutina, el desengaño de una relación anterior, una novia loca por encontrar algo a un día de la boda, dos primos haciendo honor al refranero español, un camarero pendiente de todo… y así surge un batiburrillo de ideas que si no representa a uno, representa al otro.
Ya el cartel lo viene anunciando: ‘Una comedia con final feliz’. Quién soy yo para rebatirlo. ¿Y qué más? Pues plantear asuntos ásperos sobre fidelidad. Y muchos “swingers”. Esta película veraniega, está llena de un fresquito que nos urge y que, paradójicamente, deja un calorcito, que quizás te insufle ganas de “salir del cine para ir a pasártelo mejor”, que ha dicho el propio Caballero.
Y es que siempre nos contaron que la libertad sexual iba de poder practicarlo todo y con la persona que eliges pero… ¿y si además se extendiera a ese momento donde disfrutas de una estabilidad romántica con alguien? Pero con otro, claro. Seguramente, si la ves con tu pareja, después habrá que tener conversaciones.
Esta cinta, —muy cercana a la del otro Paco, “Kiki, el amor se hace” (P. León, 2016)—, va cargada de tramas ciertamente predecibles —cuáles no lo son hoy en día—, que no se hacen pesadas, ya que pese a lo numeroso de las mismas, se acogen bien a un tiempo de metraje muy adecuado.
Tenía muchas esperanzas de entrar por primera vez en el Club Paradiso por el reparto que presentaba y me quedé perpleja con las sensaciones, que si bien la cinta no presenta nada especialmente nuevo, es disfrutona como la que más.
No obstante, y aunque la selección de los tracks musicales son especialmente reseñables, hay que apostillar que alguno se echa de más. Tanto, que tal vez se coma los diálogos en alguna que otra ocasión.
Bien es cierto que los actores —como se diría en un concurso— han venido a jugar o, lo que es lo mismo, a divertirse, a sacar su lado más perverso, pero no a demostrar las herramientas que han aprendido a lo largo de su carrera. Nada que objetarles, por otra parte.
Paco Caballero reconoce que pretendía hacer una película más estética que otra cosa, donde se sugiriera más que se mostrara. Huye de lo gratuito de las escenas de sexo. Además, añade que “está obsesionado con las parejas”. Todos sus cortos oscilan sobre ello. Y, pese a que se declara monógamo, sabe de primera mano que temas como los celos o los intercambios siguen suscitando polémicas. Sin embargo, Anna Castillo lo tiene muy claro: “Para los jóvenes de hoy en día, el intercambio de pareja ya casi no es un tema, sino simplemente algo orgánico y natural”.
Al director, que lo recordamos por “Perdiendo el Este” (2019), o su trabajo con la serie de Netflix “El vecino” (2019-), ha coescrito este metraje junto a varios guionistas de la ESCAC, con los que trabajó en “Cities” y que son artífices de películas como “Barcelona noche de invierno”, de Dani de la Orden: Daniel González, Eric Navarro y Eduard Solà.
La exquisita y gustosa fotografía corre de cuenta de David Valldepérez, bajo la producción de Carlos Fernández y Laura Fernández para Filmax. El reparto es extenso, así que nombraremos solo a unos cuantos: Ernesto Alterio, Raúl Arévalo, Luis Callejo, Anna Castillo, Pilar Castro, Álvaro Cervantes, Carlos Cuevas, Verónica Echegui, Miki Esparbé, Ricardo Gómez, María León, Melina
Matthews o Ana Milán.
No sé qué más razones estás buscando.
Necesitábamos una comedia como esta que, además, se irá llenando de buenas intenciones con el paso del tiempo, cuando no tengan que criticarla por los límites impuros que ha traspasado. El director ha hecho todo lo posible para que seamos un poco más libres. Ahora solo es cuestión de permitírnoslo a nosotros mismos.
A veces, la respuesta se encuentra en nosotros. Ahí empieza todo.
Nuestra calificación: (4/5)
